Este dispositivo, usa dos lentes de 180 grados para capturar imágenes esféricas casi perfectas.
La Gear 360 de Samsung es un aparato poco convencional. Su diseño es a la vez retro y futurista, mitad una webcam de comienzos de siglo y mitad un invasor alienígena de las películas de Hollywood.
Lo que hace este aparato, que Samsung trae al mercado colombiano luego de la expectativa creada por su lanzamiento, a comienzos de año, en el Mobile World Congress, es grabar videos y tomar fotos en 360 grados y facilitar compartirlos en las redes sociales.
Con sus dos lentes de 180 grados cada uno, la Gear 360 captura una imagen esférica casi perfecta (hay un ‘punto ciego’ en la parte de abajo, en donde se monta el trípode) y permite ‘recorrerla’ con solo mover el dispositivo, en el caso de un celular, o arrastrar el cursor, para un PC. Si se instala en un visor como el Samsung Gear VR o el Google Cardboard, la imagen permite a quien la examina una experiencia inmersiva de realidad virtual.
Hay que decirlo: la calidad del video no es óptima, aunque supera a la de otras cámaras similares. Claramente no es 4K, ni Full HD. Unos modestos 3840 x 1920 píxeles dejan ver que el objetivo de estos videos no son las pantallas de alta resolución, sino YouTube, o las redes sociales. La apuesta, una vez más, es la inmersión.
Es algo parecido a lo que ocurre con la 360 de LG o con la Ricoh Tetha (ver imagen), que sacrifican resolución para proponer experiencias interactivas.
Si bien se puede usar de manera independiente, con solo oprimir un botón, la Gear 360 depende de un celular Samsung (solo acepta el S6, el S7 y el Note 5) para que usted pueda usarlo como monitor. Sorprende lo útil que es la minipantalla que incorpora su cuerpo esférico, pues permite fijar el modo de grabación para grabar video, time-lapse o ‘loops’ al estilo Boomerang.
Para usarla en tándem con un smartphone Samsung, la firma lanzó una app llamada Gear 360 que, hay que decirlo, sobresale por su facilidad de operación. Sobre todo, por lo sencillo que hace el proceso de emparejado habitual de cámara y teléfono.
Eso sí, como la conexión es vía WiFi Direct, espere un impacto en la vida de la batería. En nuestras pruebas rinde un promedio de una hora de grabación.
Es más que suficiente. Claramente no se trata de un aparato para grabar todo todos los días. Pero a la hora de producir ‘experiencias’ de unos cuantos minutos, uno ve por qué la surcoreana eligió apostar por el formato.
No es, qué duda cabe, una cámara para todos los gustos. No solo por las limitaciones en resolución, sino porque el empalme de las imágenes dista de ser perfecto. Pero dado que permite compartir directamente un video o descargarlo y editarlo después, es un recurso versátil, muy apropiado para realizadores semiprofesionales. Sale a la venta en diciembre, por 999.900 pesos.
Otros modelos en el mercado
Ricoh golpeó primero con su modelo Theta S. Usa dos lentes con apertura F/2.0 con sensores de 1/2.3” de 12 megapíxeles para crear imágenes en formato JPEG con una resolución de 5.376 × 2.688.
También puede grabar video esférico con sonido estéreo en alta definición a 30 cuadros por segundo, si bien por un máximo de 25 minutos.
Tiene una memoria de 8 GB que puede almacenar hasta 1.600 fotografías y grabar hasta 65 minutos de video a 1080 p. Es ultra-portátil y se vende por 346 dólares.
Por su parte LG dotó a su 360 Cam de un granangular doble de 13 megapíxeles que logra una resolución de 2.560 por 1.280. Usa una memoria micro SD que puede ser hasta de 2Tb y no puede ser utilizada sin una.
Al igual que Ricoh, LG optó por una forma tubular, con base plana, que simplifica su instalación sobre cualquier superficie. De todas maneras, puede ser montada sobre un trípode regular. Se conecta con sencillez al LG G5 y es compatible con Google Street View. Se vende por cerca de 600.000 pesos.
TECNÓSFERA 25 de mayo 2017 , 09:42 a.m.
